Otro día llega a su fin, estoy parado frente a las persianas, mi percepción, la ilusión de lo irreal se vuelve real y la simulación llega a su fin...
Un sin numero de veces que me he advertido que no vivimos en un mundo falaz...No entiendo por que a veces tenemos que fingir que las cosas son diferentes...
En una búsqueda loca de inteligencia me las arregle para ocultar la poca que tengo, aunque mis síntomas no son muy diferentes, soy lo suficientemente listo para esconderlo...
Siempre queriendo protegernos de la realidad que nos rompe de vez en cuando, de temores irreales, pero mi escudo se hace transparente...
Es algo que no puede ser interpretado o entendido; es una astilla en los alrededores de la mente, como alfileres clavados en la propia existencia ...
"El simulacro nunca es aquello que oculta la verdad, es la verdad la que oculta que no hay ninguno"
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